Todos sabemos que
pensar en un idioma que no conocemos no es tarea fácil. Pero, escucha… cuando
éramos muy pequeños comenzábamos a oír palabras desconocidas y las íbamos
fijando en nuestra mente. Y entendíamos lo que nos decían y éramos capaces de
expresar una idea… ¿o no? ¡Se trataba pues de “pensar” y “practicar”!
Con el inglés ocurre algo parecido: simplemente aprende a
pensar sin repetirlo en tu idioma. Verás que las palabras quedarán grabadas en
tu mente más de lo que crees y podrás usarlas sin problemas.
1:Usa diccionarios inglés-inglés, nunca bilingües: Imagina
que estás en Nueva York y le preguntas la hora a alguien señalando tu muñeca.
La persona podrá decirte “six thirty” y mostrarte su reloj… pero seguramente no
te va a decir “las seis y treinta”. El diccionario inglés-inglés funciona de
forma similar: no traduce, sino que te explica sólo en inglés para que te
acostumbres a pensar en ese idioma.
2:Aprende palabras clave: Existen unas 100 palabras fundamentales
usadas casi siempre en el inglés escrito y otras tantas en el inglés oral. ¡Qué
simple! Quiere decir que conociendo estas palabras ya tienes armado tu primer
vocabulario.
3:Amplía tu vocabulario con verbos: Como en una película,
ahora necesitas “acción”, porque el meollo de un idioma está en los verbos; lo
demás se aprende después. ¡No creas que estoy hablando de todas las
conjugaciones! Lo que te sirve básicamente son los infinitivos, como para que
puedas ir dando forma a tus primeras frases.
4:Conoce los “phrasal verbs”: ¿Y esto qué es? Fíjate en esta
situación: si alguna vez alguien te dice “turn on the TV” y tú giras el
televisor… bueno, lamentarás no conocer los “phrasal verbs” porque aunque te
parezca extraño “turn on” no quiere decir “girar”, sino “encender”. El inglés
hablado utiliza muchos “phrasal verbs” y aprender algunos te ayudará a
comprender mejor el lenguaje de todos los días… es decir, el primero que vas a
encontrar en un país de habla inglesa.
5:Conoce las contracciones: ¿Otra vez con lo mismo? Mira
esto: le preguntas a una persona dónde debes esperar el autobús para ir al
centro y te contesta “dunno”. ¿Qué es eso? Claro que si te hubiera dicho “I
don’t know” seguro que lo hubieras entendido. Es que el inglés es sumamente rico
en contracciones como “wanna”, “gonna”, “gotta” y muchas otras. No, no suena a
chino y si pones atención en las letras de muchas canciones, apuesto que vas a
encontrar unas cuantas.
6:Utiliza tu nuevo vocabulario: Con tu dedicación, seguro
que vas a ser capaz de aplicar lo que aprendes. Aprovéchalo. Escribe frases,
elabora preguntas y contéstalas. Esto no sólo te permitirá pensar en inglés,
sino también ganar fluidez en tu manejo del idioma. Busca un amigo para
practicar y si es nativo del inglés, mejor.
7:Usa “flash cards”: Las tarjetas didácticas o flash cards
son una gran ayuda para pensar en inglés sin necesidad de traducir a tu lengua.
Se vienen usando desde hace décadas y ahora han llegado al formato electrónico.
¡Qué te parece! Si tienes iPad, iPod Touch o iPhone, por ejemplo, podrás
descargar gratuitamente una infinidad de “flash cards” y practicar con ellas
adonde quiera que vayas.
8:Sigue un ritmo: La efectividad de tu aprendizaje rápido
depende de tu constancia. Pero no me sorprende que no seas constante porque
estas técnicas son muy entretenidas y te van a entusiasmar.
9:No tengas miedo al error: Pregúntales a tus padres cómo
era tu primer vocabulario cuando recién comenzaste a hablar en tu idioma.
Seguro que vas a reírte… pero con el tiempo aprendiste y perfeccionaste tus
errores. Recuerda: con el inglés pasará lo mismo.
10: Disciplínate: Tú quieres aprender inglés para
utilizarlo, no para enseñarlo. Entonces concéntrate sólo en ese objetivo y
sigue adelante. Te causará sorpresa comprobar los resultados logrados al poco
tiempo de haber comenzado tu aprendizaje.
No hay comentarios:
Publicar un comentario